miércoles, 26 de octubre de 2011

Mejorar la Ley Electoral



Con la llegada de elecciones, están apareciendo multitud de propuestas  para reformar la Ley Electoral, tanto desde partidos minoritarios y otros movimientos como (más tímidamente) desde los mayoritarios. Veamos cómo funciona el actual sistema y por qué es mejorable.


El Congreso español consta de 350 escaños, que se reparten entre las provincias en proporción a su población (ver gráfico). Una vez hecho el recuento de votos de cada provincia, sus escaños se asignan entre los partidos siguiendo la ley d’Hont. A esta ley se la ha acusado injustamente de favorecer a los grandes partidos, pero no es así. Básicamente, hace la asignación de escaños por orden de votos por escaño obtenidos, que es un sistema totalmente lógico y por ello utilizado en muchos países.


El problema viene de que cada provincia es una circunscripción electoral diferente. Aunque las elecciones sean a nivel estatal, los escaños de cada provincia se reparten entre los partidos más votados, mientras el resto de votos acumulados en ella por otras formaciones se descartan.



Esto afecta principalmente a los partidos minoritarios o que no tienen el voto concentrado a nivel provincial. Además, este sistema fomenta el “voto útil” entre la población, disminuyendo aún más las posibilidades de otras opciones.

En la tabla inferior tenemos los resultados reales de 2008 y un estudio de 2 alternativas con circunscripción única a nivel estatal. Una opción (A) con reparto proporcional entre todas las formaciones que alcancen al menos 1 escaño (1/350=0,285% de votos) y otra (B) según la ley D’Hont.





Las conclusiones que podemos extraer son:
  • El reparto proporcional y la ley d’Hont dan prácticamente los mismos resultados, lo importante es la circunscripción única.
  • En ambas alternativas, el % de escaños se acerca más al % real de votos.
  • Los partidos mayoritarios pierden escaños, mientras los minoritarios los ganan, al contarse realmente todos sus votantes.
  • Los partidos nacionalistas, al contrario de lo que se podría pensar, no experimentan cambios concretos: unos mejoran y otros empeoran. Como sus votos están concentrados, no se ven afectados por el sistema actual, pero el estatal tampoco les perjudicaría.
En definitiva, el sistema de conteo estatal es más justo, pero el cambio será difícil, pues perjudica a los grandes partidos. Para los más interesados, dejo un Excel con todos los cálculos, que podrá utilizarse también para ver cuál sería el resultado con los datos de las próximas  elecciones.

7 comentarios:

  1. Buen trabajo! Nosotros hemos hecho algo parecido: leyelectoral.es A ver si entre todos conseguimos explicar por qué es necesario modificar la legislación.

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  2. Hay que cambiar la ley electoral ya!

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  3. Hola, muy buena explicación del actual sistema de reparto. Creo que sería ya perfecto si completaras el artículo haciendo referencia al aspecto territorial de la Ley electoral actual y cómo afectaría el cambio a una circunscripción única. Me explico, si aplicamos la Ley d'Hont a nivel estatal (o un reparto proporcional, queda claro que viene a dar lo mismo), las grandes ciudades concentran un % excesivo de representación parlamentaria, en detrimento de las regiones (provincias) más despobladas: p.ej Ávila, Soria, Teruel, Ciudad Real...
    A mi entender lo más justo sería hacer un sistema que mejorase la proporcionalidad sin restar peso a la representatividad de las zonas despobladas: por ejemplo, todas las provincias tienen un mínimo de dos escaños a los que se aplica la Ley d'Hont; el resto de escaños (se podría aumentar el número de congresistas a 400) se reparten mediante sistema proporcional con circunscripción única.

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  4. Hola, gracias por tu opinión. Respecto a al sistema que propones, yo creo que no beneficiaría a la gente de las provincias despobladas, sino directamente a los grandes partidos nuevamente. Si Soria tiene sólo 2 escaños y los reparte de forma independiente mira lo que pasa:
    http://www.eleconomista.es/elecciones/20-N/resultados/Castilla-y-Leon/Soria
    Un escaño para cada uno en 2011, lo mismo que en 2008, mientras todos los votos de la gente que ha votado a partidos minoritarios se descartan. En mi opinión, con circunscripción única mejoraría la representatividad de todo el mundo, grandes y pequeñas provincias.

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  5. Para cambiar la ley electoral hay que cambiar a los políticos de clase pequeño burguesa que la han firmado. O lo que es parecido hay que expulsarlos.

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  6. Si se va a circunscripción única en el Parlamento habría que compensarlo haciendo del Senado una verdadera Camara de representación territorial, incluso con modificación de sus competencias.

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  7. Así nos va en este país...
    Pero la mayoría de gente se dedica a votar a los partidos que no quieren que esto cambie para seguir manteniendo sus porcentajes de poder... y que solo les preocupa sus propios intereses (eso incluye a los 2 nuevos partidos que se están comportando como los de siempre).

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